La selección inglesa de rugby se impuso a Australia por 12-10 en el primer partido de los cuartos de final del Mundial, que se está disputando en tierras francesas, y consiguió así ser el primer equipo en sellar su pase a las semifinales.

De esta forma, Inglaterra continúa con paso firme en este campeonato en el que tratará de revalidar el título que consiguió en la última edición (2003) y confirmarse como la única selección perteneciente al Hemisferio Norte, capaz de alzarse con un título mundial.

Jonny Wilkinson fue el auténtico protagonista del choque ante los aussies puesto que logró todos los puntos para Inglaterra en el Velódromo de Marsella, donde se celebró el encuentro, que comenzó con varios errores, de ambas selecciones, hasta que el capitán australiano, Stirling Mortlock, abrió el marcador con un penal.

Tras lo que parecía que iba a ser el inicio de un buen partido de los Wallabies, Inglaterra tomó las riendas y con mucho coraje logró dar la vuelta al marcador, incluso después de llegar con desventaja al descanso (10-6).

Dos penales de Wilkinson en la segunda mitad (min.51 y 60) pusieron por delante al XV de la Rosa para vencer por el escaso margen de dos puntos, que les permiten seguir en el camino para reeditar la final de 2003 y una vez más, en contra de todo pronóstico, hacerse con la eliminatoria de cuartos de final.

Los Wallabies lo intentaron al final del partido sin mucho acierto, pero no fueron capaces de sobrepasar la gran defensa blanca. A dos minutos del final, Mortlock erraba un difícil penal desde 52 metros que podía haber significado la victoria australiana.

Gracias a una sensacional segunda parte, los ingleses acabaron con las ilusiones australianas, y el apertura inglés Wilkinson logró entrar en la historia de este torneo al desbancar al escocés Gavin Hastings como máximo anotador de los Mundiales de Rugby. Inglaterra espera ahora rival, que saldrá del duelo que enfrenta a Nueva Zelanda contra Francia esta noche.