Víctor puso al ‘Divino’ a la puerta del infierno pero no le empujó
El joven luchador de Mansilla tuvo a Héctor con caída y media y arrodillado, pero no remató
F. Fernández Villafañe
La noticia estaba allí. Víctor Díez, ‘Pulsos’ de Mansilla, el último luchador que tiró a Héctor, hace dos años, le tenía otra vez contra las cuerdas, con caída y media, la suma de tres medias.
Era el momento de la verdad. Y Víctor volvió a hacer lo mismo de las tres medias anteriores: ir a por él, como sólo él puede hacer, a puro ‘guevo’, con esos brazos prodigiosos suyos. Y lo llevaba. Héctor voló por los aires, aguantó como pudo, ‘El Divino’ puso la rodilla en el suelo y salvó la caída en el último instante. Le dio la vuelta y logró la victoria que más se le ha resistido en los dos últimos años. El público silbaba, se ponía del lado del más débil, querían ver una victoria del de Mansilla y se agarraban a la posibilidad de que el de C Campohermoso hubiera tocado con el hombro. Antonio Getino, ayer árbitro, lo tenía muy claro: «No tocó, te lo digo yo que estaba encima». El propio Víctor no quería echar leña al fuego y Clemente ‘El Junco’, tantas veces rival de Héctor, ofrecía otra clave muy atinada: «No se le puede ganar a Héctor con cuatro medias. Ya le dio tres que son muchas, hay que apretar, la lucha es así».
Víctor sonreía, sabía que tenía razón el de Tendal. «A ver si otro día, pero no lo vuelvo a tener así en mucho tiempo, seguro», lamentaba, vestido aún con la camiseta amarilla de líder, que ayer perdió y ya luce Héctor, que explicaba que no había tocado con el hombro, «pero entiendo a la gente».
En la final le esperaba Morala, también muy motivado pues estaba en su comarca y le miraban ojos de familiares que esperan mucho de él. Venía con buenas vibraciones después de un precioso combate con David, al que le dio un garabito en el aire de cromo, y también ofreció una preciosa semifinal con su amigo Samuel Pérez, de Alija. Fue otro combate de los que gustan a la gente, de los que hacen soñar con que hay futuro más allá de Héctor y el de Sandoval ganórelativamente bien.
¿Estaría ya maduro Héctor después de lo de Víctor? ¿Habría noticia en Villafañe? Pues no, aquel uy de Víctor se quedó allí y Morala mostró sus trazas de futuro, pero ‘El Divino’ no estaba para más bromas, el tren de la sorpresa ya había marchado.
Comentarios recientes