La conocida compañía Yllana representa hoy en Villabalter ‘Olimplaff’

L. Castellanos León
El teatro de humor gestual encuentra en la compañía Yllana a uno de sus más relevantes representantes en España. Desde que en 1991 se iniciara en el cultivo de un estilo propio, en el que no falta la irreverencia y la ironía y siemprenecesitado de la implicación activa del público, son muchos ya los espectáculos que han ido coronando su prestigio y consolidando su reputación en el ejercicio de una acción teatral llena siempre de dificultad. Títulos como ‘666’, ‘Glub, Glub’, ‘Los Mejores Sketches de Monty Python’ o ‘Splash’ han ido forjando la trayectoria de esta compañía, encargada también de la gestión de el emblemático teatro madrileño Alfil.
Probablemente, la Semana de Teatro Intergeneracional en la Calle de Villabalter vive hoy uno de los momentos más importantes de sus diez años de historia al acoger un espectáculo de Yllana, ‘Olimplaff’, programado para hoy, a las 22.30 horas, en el escenario de la calle La Fuente. César Maroto, Gus Cortés y Juanfry Durado son los intérpretes de este montaje que, fiel al estilo de la compañía, se fundamenta en el uso del lenguaje gestual y del clown, así como de la pantomima.
‘Olimpiaff’ sirve de escenario a una singular olimpiada donde tres extravagantes atletas harán lo posible y lo imposible por alzarse con el triunfo y subirse a lo más alto del podio. Así, este trío de personajes buscará la complicidad y la participación del público que acabará implicado en partidos de waterpolo con efectos especiales tipo Matrix, encuentros tenísticos donde se hace sentir la huella de Charlot, disputas futbolísticas imposibles, exhibiciones ginmásticas increíbles o presencias de hinchas acérrimos y extremos. Desde luego, el elemento visual constituye una de las grandes premisas que dan carácter y articulan este espectáculo, abierto a todo tipo de públicos y donde se cuida con especial detalle y esmero el gag y alcanza un protagonismo especial la onomatopeya como fuente de expresión teatral. Se trata, sin duda, de un montaje lleno de atractivos y en absoluto prescindible.