Efe Tarragona
Un trabajador de la planta de Camy-Nestlé de la localidad catalana de Vila-seca murió ayer de un disparo cuando se enfrentaba a cuatro atracadores que, armados con una escopeta y un arma blanca, robaron 7.000 euros de la empresa. Según informaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Tarragona, el atraco tuvo lugar a las 11,40 horas, cuando los cuatro asaltantes irrumpieron armados en la planta distribuidora que la fábrica de helados tiene en el polígono sur de Vila-seca.
De acuerdo con los primeros indicios, uno de los empleados de la compañía, de 37 años, se enfrentó a los atracadores para evitar el robo y, en el forcejeo con ellos, la escopeta que llevaban los asaltantes se cayó al suelo, se golpeó con el mismo y se disparó accidentalmente, alcanzando al trabajador. Tras hacerse con un botín de 7.000 euros, los ladrones han escaparon en un coche del modelo Fiat Brava y de color rojo que había sido robado en Tarragona el domingo pasado y con el que, al parecer, intentaron ayer por la mañana otros asaltos en empresas de este polígono industrial.