Su nombre siempre ha aparecido en todas las quinielas provinciales

L.C. León
La noticia del cese del leonésAlfredo Prada como miembro del Gobierno de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid cayó ayer como una bomba en los medios políticos leoneses. Y no sólo en los de su propias filas del PP leonés. Ni siquiera los populares de la provincia que el pasado fin de semana participaron en el congreso de Valencia, en el que Prada fue elevado a la cúpula nacional del partido,aventuraban semejante desenlace. Pero Alfredo Prada ya es un viejo conocedor de la cara más amarga de la política. De hecho, durante su estancia en León y antes de recalar en la capital de España como vicepresidente de esta Comunidad, fue conocido como el eterno aspirante a dirigir los designios del PP leonés. Durante la década de los 90, cada vez que se aventuraba algún tipo de renovación en la dirección provincial del partido, sonaba su nombre para encabezarla. Y ya se sabe que en política lo peor que te puede pasar es que nombren como aspirante. Este hecho, si embargo, no sólo no le ha movido al rencor, sino que se ha convertido en el mejor embajador de la provincia en Madrid. Una actitud que va completamente con su carácter. Es difícil encontrar a alguien, dentro y fuera de su formación que hable mal de él.
Alfredo Prada Presa nació en León el 28 de agosto de 1959. Casado y con cuatro hijos, se licenció en Derecho en la Universidad de León y es abogado. En los años 80 comenzó desempeñando relevantes cargos en la junta local de la entonces AP de León, a través de las Nuevas Generaciones de esta formación, cuyo vicepresidente nacional era un paisano y compañero de generación, Mario Amilivia, además de presidente del partido en León entre 1986 y 1989. Prada pasó estrenados los 90 a ocupar el cargo desecretario general en la provincia con Miguel Pérez Villar como presidente del refundado PP. Tras el fracaso popular en las elecciones generales del 1993, donde contra todos los pronósticos no consiguieron ganar las elecciones, Mario Amilivia recuperó la Presidencia.
Alfredo Prada da el salto a la política Nacional en 1993, con su elección como senador electo por León en la V Legislatura. Fue reelegido senador electo por León en la VI Legislatura y se hizo cargo de la Secretaría General del Grupo Popular del Senado. Volvió a ser reelegido senador por León en la VII Legislatura y ostento el cargo de vicepresidente primero de la Mesa del Senado durante la Presidencia de Esperanza Aguirre en el Senado.
Antes de su marcha a Madrid, fue sonada su sorpresa y la de otros dirigentes del PP, ante la designación de José María López Benito como sucesor de Amilivia en el año 2000. En esas fechas Prada era portavoz provincial del PP. El congreso del PP regional en el que Juan Vicente Herrera toma las riendas del partido tras la marcha de Juan José Lucas, Prada pasa de coordinador de área a vocal.
Tras ganar las elecciones autonómicas, celebradas el 26 de octubre de 2003, Alfredo Prada se convierte en Vicepresidente Segundo y Consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, el 22 de noviembre de ese mismo año. Revalidó el cargo tras las últimas autonómicas de mayo de 2007
Su marcha del Ejecutivo de la Comunidad dispara la rumorología sobre su posible regreso a la provincia de León.