El Montpellier, rival del Ademar, sólo ha caído una vez en siete años en su casa

Jesús Coca León
Los ecos del sorteo de ‘Champions’ centran la actualidad ademarista, que tiene muy claro que su principal rival viene de tierras francesas. Y es que Montpellier y Ademar parecen destinados a repartirse las dos primeras plazas, pero sus enfrentamientos cobrarán vital importancia al contarse los puntos que logren en estos duelos directos en la siguiente fase y, por tanto, tener un pie en cuartos si se llega a ella con cuatro en el casillero.
Lo que parece claro es que el Montpellier es un conjunto con dos caras. Asequible cuando sale de su pista, se convierte en un titán en el infierno del René Bougnol, donde se muestra intratable. Y es que en las últimas siete temporadas, donde acumula seis participaciones en ‘Champions’ y una en la Recopa, tan sólo ha caído derrotado en una sola ocasión. Los números asustan a cualquiera: 38 victorias, dos empates y una derrota es su balance europeo de los últimos siete años, con el ejemplo de la victoria contra el posteriormente campeón Ciudad Real la temporada pasada como último aviso de su potencial.
Y si es potencia en Europa, en Francia es el gran dominador. Tras cinco títulos consecutivos, el Ivry le destronó hace dos años, pero el rey francés recupero su tronóla temporada pasada, cuando logró el triplete al ganar también la Copa de Francia y la Copa de la Liga.
Salvo que haya cambios en su plantilla de aquí a comienzos de la temporada, el Montpellier basa su fortaleza en un potente siete inicial, con jugadores muy experimentados. El lateral Hmam es su principal arma: es el mayor bombardero del balonmano mundial junto a Yoon, y una pesadilla desde los nueve metros.Le acompañan dos jugadores muy polivalentes: un clásico como Abati, que compagina lateral y extremo, y el recién recuperado de una grave lesión Guigou, que tan pronto amenaza desde el extremo como cambia el ritmo del equipo desde el central. El ex-ademarista Bojinovic es otra arma desde la primera línea, para la que existen rumores de que podrían reforzarse con Eric Gull. Completan la nómina de principales jugadores dos pivotes contrastados como Juricek y el tunecino Tej, que es clave también el centro de la defensa.
En definitiva, que el Montpellier no es el Kiel o el Ciudad Real, pero sí un conjunto muy sólido y rocoso, con jugadores contrastados a nivel europeo, que pondrá las cosas muy difíciles al Ademar en la lucha por el primer puesto.