La contundencia de los balcánicos acaba en cuartos con el sueño nacional de medalla

Fernando Castán (efe) / pekín
La contundencia de la selección serbia de waterpolo cortó el camino de España hacía las medallas en los Juegos de Pekín, en un partido en el que los nacionales dieron muchas facilidades a los subcampeones olímpicos.
En un nefasto segundo período los hombres que dirige Rafael Aguilar encajaron un parcial en contra de 4-0 y no fueron capaces de acortar distancias ni de poner en grandes aprietos a los jugadores balcánicos.
Felipe Perrone marcó al final del primer período para que los españoles tuvieran su única ventaja en el marcador a lo largo del encuentro.
Sin embargo, el segundo fue nefasto para la selección nacional. Nada más comenzar, Udovicic empató y en el siguiente ataque protagonizado por Vujasinovic, Serbia se ponía por delante en una jugada en superioridad.
Los balcánicos aprovechaban bien las expulsiones de los españoles y éstos no eran capaces de devolverles la moneda cuando la situación les beneficiaba a ellos.
Tras perder otro ataque en superioridad, Pijetlovic, máximo anotador, no se apiadaba del portero nacional, Iñaki Aguilar, y sumaba el tercero. La moral de los jugadores de Aguilar empezaba a flojear de forma inversamente proporcional a la de sus rivales.
Ciric hizo el cuarto y Pijetlovic el quinto, mientras entre los dos tantos, Javier García trataba de acortar la diferencia con el segundo de España. La losa era muy pesada al final del primer tiempo: tres goles de diferencia (2-5). Y lo que era peor, los de Aguilar no parecían con muchos recursos para enjugarla.
Tras el descanso la tónica fue la misma de los dos primeros cuartos. Serbia marcaba con facilidad por medio de Vujasinovic y a sus rivales les costaba un mundo hacerlo.
El tercer tanto nacional llegó por medio de una extraordinaria vaselina de Guillermo Molina, pero, acto seguido, Ciric aprovechó un despiste generalizado de la defensa contraria para llevar de nuevo la diferencia a cuatro goles. Y eso que la estrella de los balcánicos, Sapic, fallaba una y otra vez sus lanzamientos y acabaría el encuentro con cero goles.
El encuentro se fue, poco a poco, desinflando, al igual que ocurrió en el duelo que ambas aficiones mantuvieron en la piscina de Yingdong. El cuarto período finalizó con un parcial de 2-2 con goles de Molina y Mario García y un par de Pijetlovic y los españoles impotentes viendo cómo se les escapaba la lucha por las medallas.
Tras la derrota, el jugador español Iván Pérez dijo que habían tenido una segunda parte «desastrosa» y que les debía servir de lección.
En las semifinales Serbia se enfrentará contra Estados Unidos y Hungría jugará contra Montenegro. España lo hará por el quinto puesto contra Croacia.