Obama y Nicolas Sarkozy consolidan su gran sintonía
El candidato pide a los franceses que cambien la imagen que tienen de EEUU, mientras el líder galo asegura, irónico, que “aman a los americanos”
OTR-Press París
Después de conquistar Berlín, el candidato demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama, viajó ayer hasta París, donde se encontró con el presidente francés, Nicolas Sarkozy. En su visita a territorio galo, el estadounidense no se dio un baño de multitudes como sucedió el pasado jueves en la capital alemana, donde congregó a unas 200.000 personas, pero sí que sirvió para consolidar su gran sintonía en el terreno político y complicidad personal con el gobernante europeo. Mientras el aspirante a la Presidencia norteamericana pidió al pueblo francés que cambie la visión que tiene de Estados Unidos, el mandatario galo aseguró que “los franceses aman a los americanos”. Durante la rueda de prensa que ofrecieron conjuntamente en el Palacio del Elíseo después de mantener un encuentro de algo más de una hora, tanto Obama como Sarkozy hablaron de «convergencia» de ideas en los principales asuntos de la agenda internacional, desde Afganistán, hasta Oriente Próximo pasando por Irán y dejaron clara la importancia de las relaciones transatlánticas, sea quien sea el próximo presidente de Estados Unidos.
“Francia está contenta de recibir a Barack Obama, porque es americano. Y los franceses aman a los americanos”, afirmó un irónico Sarkozy provocando las risas del auditorio. La escala francesa del aspirante demócrata a la Casa Blanca era vista por los observadores como la más delicada de toda la gira europea del político norteamericano, dadas las pasadas desavenencias entre París y Washington en política internacional y, especialmente, a raíz de la guerra de Iraq.
Para superar este hándicap, tanto el norteamericano como su anfitrión se esforzaron en subrayar que había que superar las “caricaturas” y los “estereotipos” que persisten a ambos lados del Atlántico y que ni Europa ni Estados Unidos deben subestimar el interés mutuo que existe para mejorar las relaciones transoceánicas. En este sentido, el rival de McCain por el poder en su país prometió que si llega a la Casa Blanca se alejará del unilateralismo y escuchará a sus aliados en política exterior.
“Una política exterior eficaz no se basará simplemente en nuestra capacidad de ser poderosos, sino en sentar las bases de un consenso”, afirmó el demócrata, quien, después de recordar que todavía no es presidente de Estados Unidos, sino solamente senador por Illinois, aseguró que su país no va actuar “solo en favor de nuestros intereses”.
Comentarios recientes