Un teléfono vibrante, una tablet brillante o el sonido de un videojuego favorito puede ser una poderosa tentación que muchos no pueden resistir.

Ahora, una nueva investigación muestra que los antojos que tenemos que conectar a nuestros dispositivos pueden ser una verdadera adicción.

“Paradójicamente, cuando se garantiza a alguien una recompensa se aburren y dejan de hacer algo muy rápidamente, mientras que cuando se construye sólo una pequeña dosis de incertidumbre… especialmente donde los dispositivos de recompensa es impulsado por los seres humanos, estamos realmente fascinados por cómo Los humanos piensan en nosotros es muy difícil para los humanos resistir. “

Aunque es demasiado pronto para saber el impacto a largo plazo de nuestro consumo tecnológico, Alter dice que hay pruebas de que los niños que pasan mucho tiempo en las pantallas temprano en la vida tienen retrasos en el lenguaje y no son comunicadores expertos.

Le dice a Tremonti que un montón de matices se pierden cuando una persona que normalmente utiliza un lenguaje preciso para comunicar algo divertido como LOL cuando mensajes de texto no puede ser factor en las expresiones faciales o un emoticon en una risa.

“Todo es una señal, y ni siquiera pensamos en eso si somos comunicadores expertos que han pasado mucho tiempo cara a cara”, dice Alter.

Horas al día en aumento que pasan en el celular

“Pero si su uso temprano de la comunicación se gasta un LOL y no adquiere esos matices, es muy difícil adquirirlos más adelante.”

“El setenta y cinco por ciento de las personas ahora dicen que pueden llegar a sus teléfonos las 24 horas del día sin tener que mover los pies”, dice Adam Alter, autor de Irresistible: The Rise of Addictive Technology y el negocio de mantenernos enganchados.

Le dice a Anna Maria Tremonti de The Current que la persona promedio pasa 3 horas y 42 minutos mirando las pantallas cada día, y ese número está aumentando.

La mayoría de la gente subestima generalmente cuánto tiempo están en sus dispositivos. Alter se incluye en esta categoría y sugiere varias aplicaciones que pueden usarse para rastrear el uso real del tiempo de la pantalla.

Alter explica que el éxito de las plataformas de medios sociales es que tienen muchos ingredientes que lo hacen irresistible, el mayor de los cuales es que una recompensa está al alcance pero nunca garantizada, al igual que los juegos de azar.