La plataforma y la arquitectura del turismo compacto Cee’d, convenientemente modificadas, han servido de base para construir la cuarta generación del monovolumen coreano, que si bien es dos centímetros más pequeño que el modelo al que sustituye, tiene cinco centímetros más de distancia entre ejes, lo que tiene un efecto beneficioso en la amplitud del habitáculo. La evolución del diseño de la carrocería ha sido tan importante que no conserva nada del anterior Carens. Es más dinámico en líneas generales, y el frontal adopta la imagen actual de Kia, lo que le acerca mucho a las formas del Kia Cee’d.
El nuevo Carens, que se pondrá a la venta a finales del próximo mes de abril, se ofrecerá con tres acabados asociados a los tres motores disponibles. Así, el motor de gasolina de 1,6 litros y 135 CV solo se venderá con el acabado Concept, al igual que el motor diésel de 1,7 litros y 115 CV, mientras para el motor diésel 1.7 de 136 CV se han reservado los acabados Drive y Emotion. Todos estos motores están asociados a cambios manuales de seis velocidades y, gracias a que disponen del sistema de parada y arranque del motor ISG, consiguen unos consumos y unas emisiones muy ajustados. De ellos se puede decir que tienen un rendimiento muy equilibrado. En especial los dos diésel manifiestan una excelente capacidad de recuperación y un funcionamiento muy progresivo y suave y con un bajo nivel sonoro.

Se conduce como un turismo y muestra un comportamiento muy seguro y cómodo. Debido a los programas que tiene la dirección de asistencia eléctrica (Normal, Confort y Sport), es muy manejable para ser utilizado en ciudad, en lo que también tiene mucho que ver su tamaño compacto. Los precios del nuevo Carens van de los 19.900 a los 29.000 euros, aunque todas las versiones tienen un descuento promocional de 3.250 euros, que alcanza los 5.250 euros si se acogen al Plan Pive 2.