El presidente de la Junta se reitera en sus ya ‘habituales’ declaraciones

Ical San Millán de la Cogolla
Las negociaciones para una posible colaboración entre el Gobierno vasco y la Junta de Castilla y León en torno al Condado de Treviño, en Burgos, se encuentran paralizadas hasta que se celebren las elecciones autonómicas en el País Vasco y tras la ratificación de la sentencia de que los convenios entre ambas instituciones están anulados. Así lo explicaron tanto el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, como la alcaldesa de Treviño, Inmaculada Ranedo, que mantuvieron, si bien, que los convenios con la Diputación Foral de Álava siguen desarrollándose para favorecer a este enclave burgalés cuya integración en Álava, según reiteró el jefe del Ejecutivo autonómico es “innegociable”.
“Sobre ese tema hay un mandato de las Cortes de Castilla y León. Pero además, por convicción, porque considero que no es el momento ni el tiempo, no hay ninguna variación. El enclave de Treviño es territorio de Castilla y León, de la provincia de Burgos. Ese asunto no es negociable”, apuntó Herrera al respecto.
Tanto el presidente de la Junta como la alcaldesa de Treviño resaltaron los acuerdos para prestar los mejores servicios a los ciudadanos del enclave y coincidieron en que el reto es lograrlos también para la enseñanza del euskera.