Felipe y Letizia ya están en Mallorca. El Príncipe llegó ayer por la mańana a la isla para participar en la regata Breitling-Illes Balears, en la que también compite el Rey. Por su parte, la princesa de Asturias aterrizó anoche en Palma y hoy tiene previsto acudir a Puerto Portals para presenciar la primera gran regata del verano que se celebra en la isla.

Los príncipes de Asturias han sido los últimos componentes de la familia real en iniciar sus vacaciones en Palma. Tras su viaje oficial a México, Felipe y Letizia han llegado por separado a la isla. Nada más aterrizar en la base aérea de Son Sant Joan, el Príncipe se desplazó hasta Puerto Portals. Allí, saludó a organizadores y participantes, y se dirigió hasta el Bribón, el barco que patronea Juan Carlos, para dar dos carińosos besos a su padre.

Felipe concurre en el torneo a bordo del velero CAM. Mientras el Rey y el Príncipe (ambos, en la foto de la izquierda, ayer) participaban en la regata, que comenzó con dos horas de retraso por la falta de viento, la Reina seguía las evoluciones de la competición a bordo de la lancha Somni, acompańada (foto derecha) por sus cinco nietos, Froilán y Victoria Federica, hijos de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, y Juan Valentín, Pablo Nicolás y Miguel, hijos de Cristina e Ińaki Urdangarín.

En esta misma regata compite el rey Harald de Noruega, un habitual en el verano mallorquín, como lo son también su hijo, Haakon, y Mette-Marit.

La presencia de Letizia y Felipe ha despertado gran expectación en la isla. La pareja tendrá residencia propia en Palma. Por primera vez, los Príncipes vivirán en Son Vent, la vivienda comprada por el Gobierno balear para garantizar la presencia del heredero en la isla.