Los blogs de tecnología y las redes de noticias financieras están sobre blockchain, una tecnología criptográfica y de confianza distribuida. La innovación clave es cómo reduce la necesidad de que las instituciones centrales de terceros sirvan como autoridades centrales de los bancos de confianza, los tribunales, las grandes corporaciones, los mercados bursátiles e incluso los gobiernos, por ejemplo.

La confianza distribuida permite formas cooperativas de organización sin un centro. Puede distribuir el poder de las instituciones centralizadas a las que tradicionalmente tienen menos poder. Estas poderosas instituciones no sueltan fácilmente su influencia.

El debate en curso sobre cómo regular las tecnologías distribuidas de confianza presupone que los defensores de las tecnologías buscarán tanto el estatus legal como la aplicabilidad. Los estudiosos proponen que tales desarrollos en la confianza distribuida son una amenaza competitiva para las monedas de papel del estado-nación.

Gran parte del enfoque actual y popular se centra en las aplicaciones de criptografía o de criptografía como Bitcoin.

Bitcoin vs. Bancos

Los reguladores están luchando para hacer frente a un cambio fundamental en la estructura del mercado. Los bancos centrales nacionales están aplicando políticas para mantener el control y regular la tecnología de confianza distribuida.

Por ejemplo, el gobierno chino ha prohibido varios tipos de actividades de confianza distribuida y está lanzando su propia moneda digital no distribuida y centralizada.

El gobierno japonés ha hecho de Bitcoin un método de pago legal, y los principales bancos japoneses planean lanzar una moneda digital J-Coin vinculada al yen, que puede ser construida sobre una cadena de bloqueo.

Rusia trató inicialmente los tráficos de divisas no aprobados como ilegales, pero ahora está determinando cómo regularlos.

De hecho, las organizaciones centralizadas y poderosas tradicionales como bancos, gobiernos, reguladores y gigantes de la tecnología están gastando miles de millones de dólares en cómo usar y controlar las tecnologías de confianza distribuida.