Mineral o no. Esa es la cuestión que mantiene en vilo a cuatro pueblos de la sierra abulense de Villafranca, al norte de Gredos. Esa, y también quién es el verdadero propietario del agua que los abastece desde hace seiscientos años. Los habitantes de Villafranca de la Sierra, Navaescurial, San Martín de la Vega del Alberche y San Miguel de Corneja llevan dos meses sublevados, desde que se enteraron de que la firma de agua mineral Bezoya, del Grupo Pascual, está cerca de obtener el derecho a explotar el agua de unos manantiales que nutren el caudal de los ríos Corneja y Alberche, afluentes del Tormes y del Tajo, respectivamente. Aunque conocían el expediente que se abrió en 2008 para dirimir quién es dueño de estas fuentes, se dicen sorprendidos por muestras de aguas tomadas presuntamente sin previo aviso y por “irregularidades” en el proceso. De confirmarse que el agua es mineral, la empresa obtendría de la Junta de Castilla y León el derecho a explotar los manantiales, amparada por la Ley de Minas de 1973, todavía vigente.

Cuatro pueblos de la Sierra de Villafranca (Ávila) pelean por mantener el control de los manantiales de los ríos Corneja y Alberche frente a las pretensiones de una gran multinacional. De momento, han conseguido retrotraer el expediente. Si quieres leer el reportaje completo, descarga la edición de la revista en PDF.